Foto: Maxi Bort. Diseño portada: Ramiro Abrevaya.
La Bersuit Vergarabat es sin dudas una de las bandas más importantes del país. A principio de la década del 2000 estalló su popularidad y se convirtieron en una banda de estadio, al punto de llenar la cancha River Plate. La posterior partida de su líder Gustavo Cordera dejo a la banda en un stand by, volvieron a juntarse y en las voces tomaron la posta Dani Suarez y Germán “Cóndor” Sbarbati, con quien conversamos, por medio del WhatsApp, en el momento que nos tuvimos que volver a cuidar por la feroz irrupción de la variante Ómicrón del Covid, para repasar su vida y carrera en La Bersuit, su relación con la música, su compañero Dani Suárez, y sus proyectos solistas, entre otros asuntos. Nos anticipó que hay disco nuevo de la Bersuit para 2022.
¿Por qué te apasionaban tanto las historietas de “Condorito”, el personaje del que nacería tu apodo?
Yo leía las historietas de Condorito en la escuela primaria, en el recreo, y mis compañeros me llamaban “Condorito”, cuando crecí me llamaron “Cóndor”. Me apasionaba el personaje, sus amigos: “garganta de lata”, “Huevoduro”, “Coné” (sobrino de Condorito), ”Pepe Cortisona” “Yayita”. Recuerdo que era una historieta graciosa, con cuentos cortos. Condorito, entre otras historietas que leía era mi favorita.
¿Qué significa para vos esa dupla que conforman desde hace varios años con Dani Suarez? ¿Alguna vez se les ocurrió volver a reflotar la banda que tenían llamada “Resortes antagónicos''?
Es una amistad que lleva muchísimos años, desde la época de Resortes Antagónicos. Llevamos cantando juntos más de 28 años. Tenemos una amistad bien aferrada, compartimos miles de cosas juntos y lo seguimos haciendo por fuera de Bersuit. Digamos que soy tío de sus hijos y él tío de mi hija. Es una amistad de hermanos.
Y si, pensamos en reflotar “Resortes Antagónicos”, pero la pandemia freno todo, ganas hay.
¿Por qué no siguieron con “De Bueyes” y sostuvieron a La Bersuit?
De Bueyes fue un proyecto solista que decidimos hacer cuando frenamos con Bersuit, porque estábamos con mucha vorágine con la banda. Y no quedaba espacio para nada, decidimos parar un par de años. Y como somos amigos y musicalmente nos llevábamos bien, decidimos formamos De Bueyes con: Daniel Suárez, Pepe Céspedes, y Oscar Righi. Por su parte, Juan Subirá también inició una carrera con su disco Fisura expuesta, Alberto Verenzuela hizo La Demanda y Carlos Martín, Música Viva. Cordera hizo La Caravana Mágica. Y todo participamos de todos los proyectos. La idea principal era descansar un poco la cabeza de Bersuit. Y fue tanto el reclamo de la gente que volvimos a calzarnos los pijamas. Gustavo no estaba en condiciones de seguir, y nosotros con calzamos esa mochila y seguimos para adelante, por eso no seguimos con De Bueyes.
¿Cómo surgió la idea de hacer “Rabia al Silencio”, tu primer disco solista, y qué sentiste al cantar junto a tu hermano?
Rabia al Silencio es un disco que tenía pendiente desde hace muchísimos años, que fue mutado con el tiempo. Como Bersuit me llevaba mucho espacio y tiempo, nunca lo podía hacer, es un disco de folclore, la pandemia me permitió ese espacio y ese tiempo y se alinearon los planetas y lo pude grabar. Sergio Pérez, mi compadre, en la producción. Pirca Producciones que aportó para poder editarlo. Me acompañaron grande artistas, entre ellos mi hermano Néstor. Siempre es muy especial cantar con él, lo hacíamos de chicos.
¿Por qué la decisión de hacer un disco exclusivamente de folclore?
Porque me considero un folclorista, que se fue para el lado del rock, también soy un roquero obviamente, y soy cantor lirico también, soy un cantor de lo que haya que cantar. El folclore son mis raíces, ahí me inicie en la música, porque haciendo folclore con mi hermano canté en fiestas, peñas, serenatas, a la gorra, así me hice artista.
¿Beneficios y contras de un proyecto solista, en comparación a formar parte de una banda?
Más que contra son todos beneficios, primero y principal porque el manager y compañía son las mismas que la Bersuit, eso hace que yo pueda hacer las dos cosas paralelas sin que se crucen los trabajos, más allá de Bersuit, yo sigo haciendo muchísimas cosas a parte de mi disco solista: soy productor, soy profesor de canto, hago muchas actividades dentro de la música que es mi rubro.
¿Qué proyectos tenés para el 2022?
Mi idea es poder mostrarle a la gente el amor que tengo por la música, tanto en Bersuit, como en los escenarios folclóricos, seguir trabajando como lo hice toda mi vida. Quiero mostrarle a la gente que más allá de un roquero con pijama, puedo carme el poncho y hacer folclore con mucho amor y respeto.
La Bersuit fue una de las bandas más convocantes del país, llegaron a tocar en River y sonaban en todos lados, y sin dudas la partida de Gustavo Cordera hizo que la banda bajara un poco su popularidad. En lo personal, ¿cómo vivís esto de haber estado “allá arriba” durante varios años, y haber tenido que volver a empezar?
No creo que con la partida de Gustavo (Cordera) la banda haya dejado de tener popularidad, nosotros seguimos llenando lugares, seguimos tocando en festivales donde la gente disfruta. Son varias generaciones que nos vienen a ver, Bersuit tiene 34 años, padres con hijos viene a disfrutar de los shows nuestros. Aquellos que antes venían a vernos, ahora son padres de familias con tiempos más acotados, entonces tenemos que salir a conquistar nuevos corazones. Nunca dejó de tener popularidad Bersuit, más allá de subidas y bajadas en cuanto a la convocatoria.
¿Qué proyectos tienen con La Bersuit para el 2022?
Retomar con las giras que quedaron pendientes por la pandemia, aunque esto todavía no terminó. Quedaron pendientes giras por México, Colombia y Europa. Dentro de poco saldrá una nueva canción con su videoclip, que formará parte de un nuevo álbum en estudio que saldrá este año.
¿Qué recuerdos tenés de la gira que hicieron los Bersuit junto a Andrés Calamaro?
De las giras con Calamaro tengo hermosos recuerdos, desde que llego Andrés con una fisura tremenda al Cielito (NdeR: Estudio de grabación, que hasta 2009 pertenecía a la Bersuit), le dimos amor, abrigo, amistad, música y las ganas de volver a tocar. Hasta que empezamos a girar por Argentina y España los mejores recuerdos con El Salmón, porque tenemos una gran admiración por él y una gran amistad.
¿Cuál fue el momento para vos de mayor potencia e inspiración artística de la Bersuit?
Somos una banda de constante potencial creativo, sea en conjunto, en dupla o individual. Componemos todo el tiempo, nos intercambiamos canciones. Si tengo que elegir un momento de nuestro mayor potencial creativo diría que fue cuando grabamos “Hijos del culo”. Ahí estábamos con nuestro potencial creativo prendido fuego. Gustavo Santaolalla (productor del disco) logró sacar el 100% década uno de nosotros, para poder hacer tal vez el mejor disco de Bersuit.
Hay dos hechos puntuales que se conmemoran cada vez que llega diciembre: las jornadas del 19 y 20, en 2001, y aquel estribillo de “se viene el estallido”, y la tragedia de Cromañón y la idea de “La Argentinidad al palo”. ¿Cómo vivís vos estos hechos y estas fechas?
Diciembre es un mes muy especial, no solo por las fiestas. Nos trae recuerdos tristes y oscuros como los del 19 y 20 de diciembre. La tragedia de Cromañón que nos marcó para toda la vida. Personalmente lo vivo con memoria y responsabilidad, y tratando de evitar volver a vivirlo.
¿Qué te parece la movida masiva que se armó con la generación de pibes y pibas que hacen trap y rap?
Me encanta que la música se vaya reciclando, que las nuevas generaciones de pibes y pibas traigan nuevo estilos. La música siempre tiene que traer nuevo caminos. Hay artistas que respeto muchísimo de ese rubro, mi apoyo incondicional a las nuevas generaciones de rap, trap, y a todos lo que quieran hacer música nueva.