Por Kranear
Sebastián Abrevaya fue el sexto entrevistado del ciclo #VivosKranear que la revista lanzó por Instagram en el marco de la pandemia del Covid-19. Licenciado en Comunicación Social de la UBA, egresado y docente en la escuela de periodismo TEA, hasta hace no tanto tiempo fue editor de la sección política de Página 12 y editor general del sitio web El Destape. También fue columnista del programa Segurola y Habana de la radio feminista Futurock. En la actualidad tiene a su cargo de la comunicación institucional de la Secretaría de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete de Ministros.
Compartimos algunas de las definiciones que compartió a lo largo de casi una hora de charla con Mariano Abrevaya Dios.
Manejo de la crisis de parte del gobierno central
Me parece que es muy positivo lo que se realizó. Hace seis meses que asumió y vive una pandemia de estas características. Además viene de un proceso de desguace del Estado en los últimos cuatro años. Imagínate la fibra de músculo que tiene que tener para desarrollar en tan poco tiempo un Estado nacional que pueda enfrentar una situación como esta. Ya sea desde lo sanitario, desde lo económico y desde lo social, me parece que, en ese sentido, que haya ganado una fuerza política con la experiencia y la fortaleza que tiene el Frente de Todos, más la experiencia de Alberto Fernández, habiendo sido jefe de gabinete de Néstor Kirchner, es algo que sin duda fue una buena decisión del conjunto de la Argentina.
Sin Ministerio de Salud, ¿qué hubiera pasado? ¿Qué hubiera pasado con el ANSES cuyo Fondo de Garantía de Sustentabilidad perdió el 50% de su patrimonio?
Empezar por los últimos para llegar a todos; si no se hubiera tomado esa filosofía, y si no se hubiera decidido el 10 de diciembre cambiar las prioridades, hoy estaríamos más cerca del caso de Brasil, Estados Unidos o de otros países con una situación terrible.
Estrategia de comunicación oficial
Veo un esfuerzo muy grande del gobierno para comunicar medidas, y también hay que decir que lo agarra en un contexto de un mapa de medios muy complejo, que hoy está claramente manejado por grandes grupos económicos como Clarín, La Nación, etcétera, que tienen intereses y ejercen presión, por ejemplo para que la cuarentena se flexibilice.
Alberto comunica muy bien. Quizá confía demasiado en su capacidad, le puede pasar a cualquiera que sabe que tiene cierta experiencia, cierta habilidad y confía demasiado en esto. Pero si vos ves la evolución de lo que han sido las conferencias de prensa te das cuenta de que han cambiado algunas cosas. Por ejemplo, al principio Alberto se paraba y señalaba una pantalla, eso ya no lo hace más; una vez se olvidó de anunciar hasta cuándo duraba la cuarentena, eso ya no lo hace.
Me parece que está bien que el presidente sea, en ese contexto, el que tenga la voz sobre las grandes decisiones de comunicaciones. Obviamente, estaría bueno que haya más presencia federal, si bien la crisis está en el AMBA y por ahí este es el momento más crítico en este tipo de conferencia de prensa, podría haber alguna presencia de gobernadores que demuestre cómo es la realidad en otro lugar del país. Sobre todo porque hay una mirada muy porteña de los grandes medios nacionales y está bueno que haya realidades diversas y que se muestren cómo es la situación en otras partes del país
Estado presente
Es interesante ver cómo el gobierno en todas las decisiones políticas ha tenido en cuenta a los sectores que no tienen gran capacidad de lobby sobre el Estado. Se lo está teniendo en cuenta con el Ingreso Familiar de Emergencia o el programa Asistencia para el Trabajo y la Producción (ATP); hay un enorme despliegue de políticas públicas en muy poco tiempo, con dificultades para su implementación, lógicamente, por el Estado que dejó el macrismo. Me parece que si el Gobierno nacional hubiera querido mirar para otro lado, hubiera podido, de alguna manera, hacerlo con la complicidad de otros sectores. Eligió no hacerlo, y defender los sectores económicos sociales más debilitados en detrimento de otros sectores más poderosos.
Figura paternalista
El rol que tiene Alberto Fernández, que si se quiere se puede ver de un lado negativo o de un lado más paternal, en situaciones de crisis en algunos puntos, también es necesario. Obviamente que uno quiere respetar al ciudadano, considerarlo autosuficiente y no desvalorizarlo ni subestimarlo, pero también hay un momento en el vos tenés miedo y necesitás que alguien te diga que va a estar todo bien.
Hay un equilibrio en la comunicación política que tiene que juzgarse ahí y creo que las críticas por cierta idea de desprolijidades, desorganización del discurso y del mensaje, se compensan con esta idea de generar una contención, desde lo discursivo y desde la presencia de Alberto Fernández; esto me parece que es un valor muy importante.
Espionaje ilegal de Cambiemos y reforma judicial
No me sorprende. Si uno ve lo que fue la causa de D'Alessio y sigue la investigación que lleva adelante Ramos Padilla, se ve un servicio de inteligencia en connivencia con medios de comunicación y jueces, causas armadas, espionaje, y lo que salta ahora de una manera más evidente es el nexo directo con el gobierno de Mauricio Macri y una persona que estaba adentro de la Casa Rosada, Susana Martinengo.
Una cosa que en cualquier parte del mundo sería un escándalo descomunal, acá solo algunos medios simplemente la siguen. Si uno se pone a pensar su nivel de escándalo increíble, lo que choca es comprobarlo tan fehacientemente; esto lo más impactante.
Siendo pesimista, no sé si la justicia va a ir al fondo con esto. El tema de la reforma judicial que el gobierno tiene pensado enviar al Congreso es clave; es fundamental tener una justicia más transparente, tener una justicia con jueces que rindan cuentas, que den explicaciones. No puede ser que por las escuchas ilegales que se filtraban por los medios de comunicación no haya absolutamente ningún responsable, que no haya nadie que sea investigado por eso.
Vicentín
Vos tenés al Estado interviniendo en una empresa estratégica de la economía Argentina, rescatando una empresa que para nada era próspera, una empresa que está en concurso de acreedores, que tenía muchísimas dificultades. El desarrollo natural era que el Estado se tuviera que hacer cargo, pero bueno, para algunos es comunismo. Hasta en el Senado hablaban de comunismo por algo que es un proceso constitucional. Y nuestra Constitución no es comunista por ningún lado.
Me parece que como pasó en buena parte del gobierno de Cristina y en alguna parte del de Néstor, el gobierno que trate de avanzar sobre algunos intereses de algunos sectores, se van a encontrar con obstáculos judiciales, mediáticos y políticos también.
El Destape y FutuRock
Por un lado hay una gran crisis estructural en los medios de comunicación tradicional, producto de varios factores: por un lado el económico, que tiene que ver con la caída de la publicidad, la caída en las formas en la que los medios de comunicación se sostienen económicamente, e incluso algo más profundo que tiene que ver con cómo la gente consume la información. Eso cambió drásticamente con las redes sociales, con internet, etcétera, entonces me parece experiencias como la de FutuRock, El Destape, que son medios que apuntan a un público joven y centrado en lo digital, y con una clara posición política, ya que ninguno se la da de independiente, me parece que son experiencias muy saludables y qué deberían existir más de esos medios, deberían potenciarse. Lo que lo que no sé es cómo va a desarrollarse el consumo de información; hoy no lo podemos saber.
Que haya mucho más oferta tampoco te garantiza que haya un sistema de medios equilibrado y que no haya concentración del consumo de los medios de información; no soy un especialista, pero por haberlo vivido desde adentro, sé que son experiencias que se centran mucho en el apoyo y el sentimiento de comunidad, del apoyo de tu lector y de tus suscriptores. Por un lado resuelve la ecuación en término de la sustentabilidad de los medios, pero no en cómo estructurar un sistema de medios equilibrado porque hay que llegar a grandes audiencias y no se está jugando en un sistema de libre mercado.
Corrupción en los medios de comunicación
Hay una discusión que nunca se da que es la corrupción en los medios de comunicación y los periodistas. Nunca se da esta discusión y hay un grado enorme de corrupción a través de la pauta, etcétera. Vos ves páginas web con nombres de periodistas renombrados que tienen banners de publicidad, y que nadie lee. Esto es en cierta forma corrupción en los medios de comunicación, una forma disfrazada de legalidad, además de los supuestos sobres.
Me sorprende que hay un periodista que tiene muchos seguidores en Twitter, Instagram y tiene una página perdida por ahí, que se llama marcelolongobardi.com y lo único que hace es subir sus editoriales de Radio Mitre y alguna que otra noticia. Con suerte le darán trabajo o dos o tres pasantes que seguramente estarán precarizados, y que con eso se le da cierta visibilidad a esa página web. Así como eso tenés a Majul, Feinmann, Novaresio. Si vos te pones a rascar un poquito, entre las principales figuras de los medios de comunicación hegemónicos, te das cuenta de que hay de todo. Había una pauta del Senado de la Nación cuando Gabriela Michetti era el presidente del senado, que vos no tenés ni idea de cómo se justificaba ni cómo se sostenía.
Carlos Abrevaya
Hay una herencia, pero no pesada, sino muy linda, que cada vez que recuerdo públicamente la figura de mi viejo siempre del otro lado me devuelven infinidad de comentarios de afecto, de cariño, de admiración. Ya pasaron 26 años desde que mi viejo falleció y me sorprende cuánta gente todavía lo recuerda, cuánta gente tiene anécdotas con él.
A mí me pone muy contento, me hace muy feliz saber eso. Al mismo tiempo me da un sabor medio agridulce o amargo si querés, porque se me hace un poco más pesada la ausencia. ¿Cómo decir? ¡Era tan capo! ¡Tanta gente lo quería! ¡La puta! ¿Por qué no está acá hoy? ¿Por qué se fue tan pronto? Tenía apenas 45 años.
Lo que me pasa cuando veo parte de su trayectoria, cuando veo algún capítulo de la Noticia Rebelde, cuando leo algo que haya escrito, me parece que hay un montón de reflexiones que tienen una vigencia enorme. Me parece muy llamativo, como que los problemas de la Argentina vienen desde hace muchos años repitiéndose, me llama la atención eso y coincido prácticamente con todo lo que dice incluso cuando uno hace una lectura injusta, tratando de ponerle parámetros de esta realidad a una realidad de hace veinte o treinta años. Por ejemplo el tema de los medios de comunicación, en el libro Medios Locos, él hace un gran llamado a la sociedad argentina a que asuma su responsabilidad en la lucha por medios de comunicación democráticos que estén cerca de los problemas de la gente.
https://youtu.be/-5PXOGUc67k
Sebastián Abrevaya fue el sexto entrevistado del ciclo #VivosKranear que la revista lanzó por Instagram en el marco de la pandemia del Covid-19. Licenciado en Comunicación Social de la UBA, egresado y docente en la escuela de periodismo TEA, hasta hace no tanto tiempo fue editor de la sección política de Página 12 y editor general del sitio web El Destape. También fue columnista del programa Segurola y Habana de la radio feminista Futurock. En la actualidad tiene a su cargo de la comunicación institucional de la Secretaría de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete de Ministros.
Compartimos algunas de las definiciones que compartió a lo largo de casi una hora de charla con Mariano Abrevaya Dios.
Manejo de la crisis de parte del gobierno central
Me parece que es muy positivo lo que se realizó. Hace seis meses que asumió y vive una pandemia de estas características. Además viene de un proceso de desguace del Estado en los últimos cuatro años. Imagínate la fibra de músculo que tiene que tener para desarrollar en tan poco tiempo un Estado nacional que pueda enfrentar una situación como esta. Ya sea desde lo sanitario, desde lo económico y desde lo social, me parece que, en ese sentido, que haya ganado una fuerza política con la experiencia y la fortaleza que tiene el Frente de Todos, más la experiencia de Alberto Fernández, habiendo sido jefe de gabinete de Néstor Kirchner, es algo que sin duda fue una buena decisión del conjunto de la Argentina.
Sin Ministerio de Salud, ¿qué hubiera pasado? ¿Qué hubiera pasado con el ANSES cuyo Fondo de Garantía de Sustentabilidad perdió el 50% de su patrimonio?
Empezar por los últimos para llegar a todos; si no se hubiera tomado esa filosofía, y si no se hubiera decidido el 10 de diciembre cambiar las prioridades, hoy estaríamos más cerca del caso de Brasil, Estados Unidos o de otros países con una situación terrible.
Estrategia de comunicación oficial
Veo un esfuerzo muy grande del gobierno para comunicar medidas, y también hay que decir que lo agarra en un contexto de un mapa de medios muy complejo, que hoy está claramente manejado por grandes grupos económicos como Clarín, La Nación, etcétera, que tienen intereses y ejercen presión, por ejemplo para que la cuarentena se flexibilice.
Alberto comunica muy bien. Quizá confía demasiado en su capacidad, le puede pasar a cualquiera que sabe que tiene cierta experiencia, cierta habilidad y confía demasiado en esto. Pero si vos ves la evolución de lo que han sido las conferencias de prensa te das cuenta de que han cambiado algunas cosas. Por ejemplo, al principio Alberto se paraba y señalaba una pantalla, eso ya no lo hace más; una vez se olvidó de anunciar hasta cuándo duraba la cuarentena, eso ya no lo hace.
Me parece que está bien que el presidente sea, en ese contexto, el que tenga la voz sobre las grandes decisiones de comunicaciones. Obviamente, estaría bueno que haya más presencia federal, si bien la crisis está en el AMBA y por ahí este es el momento más crítico en este tipo de conferencia de prensa, podría haber alguna presencia de gobernadores que demuestre cómo es la realidad en otro lugar del país. Sobre todo porque hay una mirada muy porteña de los grandes medios nacionales y está bueno que haya realidades diversas y que se muestren cómo es la situación en otras partes del país
Estado presente
Es interesante ver cómo el gobierno en todas las decisiones políticas ha tenido en cuenta a los sectores que no tienen gran capacidad de lobby sobre el Estado. Se lo está teniendo en cuenta con el Ingreso Familiar de Emergencia o el programa Asistencia para el Trabajo y la Producción (ATP); hay un enorme despliegue de políticas públicas en muy poco tiempo, con dificultades para su implementación, lógicamente, por el Estado que dejó el macrismo. Me parece que si el Gobierno nacional hubiera querido mirar para otro lado, hubiera podido, de alguna manera, hacerlo con la complicidad de otros sectores. Eligió no hacerlo, y defender los sectores económicos sociales más debilitados en detrimento de otros sectores más poderosos.
Figura paternalista
El rol que tiene Alberto Fernández, que si se quiere se puede ver de un lado negativo o de un lado más paternal, en situaciones de crisis en algunos puntos, también es necesario. Obviamente que uno quiere respetar al ciudadano, considerarlo autosuficiente y no desvalorizarlo ni subestimarlo, pero también hay un momento en el vos tenés miedo y necesitás que alguien te diga que va a estar todo bien.
Hay un equilibrio en la comunicación política que tiene que juzgarse ahí y creo que las críticas por cierta idea de desprolijidades, desorganización del discurso y del mensaje, se compensan con esta idea de generar una contención, desde lo discursivo y desde la presencia de Alberto Fernández; esto me parece que es un valor muy importante.
Espionaje ilegal de Cambiemos y reforma judicial
No me sorprende. Si uno ve lo que fue la causa de D'Alessio y sigue la investigación que lleva adelante Ramos Padilla, se ve un servicio de inteligencia en connivencia con medios de comunicación y jueces, causas armadas, espionaje, y lo que salta ahora de una manera más evidente es el nexo directo con el gobierno de Mauricio Macri y una persona que estaba adentro de la Casa Rosada, Susana Martinengo.
Una cosa que en cualquier parte del mundo sería un escándalo descomunal, acá solo algunos medios simplemente la siguen. Si uno se pone a pensar su nivel de escándalo increíble, lo que choca es comprobarlo tan fehacientemente; esto lo más impactante.
Siendo pesimista, no sé si la justicia va a ir al fondo con esto. El tema de la reforma judicial que el gobierno tiene pensado enviar al Congreso es clave; es fundamental tener una justicia más transparente, tener una justicia con jueces que rindan cuentas, que den explicaciones. No puede ser que por las escuchas ilegales que se filtraban por los medios de comunicación no haya absolutamente ningún responsable, que no haya nadie que sea investigado por eso.
Vicentín
Vos tenés al Estado interviniendo en una empresa estratégica de la economía Argentina, rescatando una empresa que para nada era próspera, una empresa que está en concurso de acreedores, que tenía muchísimas dificultades. El desarrollo natural era que el Estado se tuviera que hacer cargo, pero bueno, para algunos es comunismo. Hasta en el Senado hablaban de comunismo por algo que es un proceso constitucional. Y nuestra Constitución no es comunista por ningún lado.
Me parece que como pasó en buena parte del gobierno de Cristina y en alguna parte del de Néstor, el gobierno que trate de avanzar sobre algunos intereses de algunos sectores, se van a encontrar con obstáculos judiciales, mediáticos y políticos también.
El Destape y FutuRock
Por un lado hay una gran crisis estructural en los medios de comunicación tradicional, producto de varios factores: por un lado el económico, que tiene que ver con la caída de la publicidad, la caída en las formas en la que los medios de comunicación se sostienen económicamente, e incluso algo más profundo que tiene que ver con cómo la gente consume la información. Eso cambió drásticamente con las redes sociales, con internet, etcétera, entonces me parece experiencias como la de FutuRock, El Destape, que son medios que apuntan a un público joven y centrado en lo digital, y con una clara posición política, ya que ninguno se la da de independiente, me parece que son experiencias muy saludables y qué deberían existir más de esos medios, deberían potenciarse. Lo que lo que no sé es cómo va a desarrollarse el consumo de información; hoy no lo podemos saber.
Que haya mucho más oferta tampoco te garantiza que haya un sistema de medios equilibrado y que no haya concentración del consumo de los medios de información; no soy un especialista, pero por haberlo vivido desde adentro, sé que son experiencias que se centran mucho en el apoyo y el sentimiento de comunidad, del apoyo de tu lector y de tus suscriptores. Por un lado resuelve la ecuación en término de la sustentabilidad de los medios, pero no en cómo estructurar un sistema de medios equilibrado porque hay que llegar a grandes audiencias y no se está jugando en un sistema de libre mercado.
Corrupción en los medios de comunicación
Hay una discusión que nunca se da que es la corrupción en los medios de comunicación y los periodistas. Nunca se da esta discusión y hay un grado enorme de corrupción a través de la pauta, etcétera. Vos ves páginas web con nombres de periodistas renombrados que tienen banners de publicidad, y que nadie lee. Esto es en cierta forma corrupción en los medios de comunicación, una forma disfrazada de legalidad, además de los supuestos sobres.
Me sorprende que hay un periodista que tiene muchos seguidores en Twitter, Instagram y tiene una página perdida por ahí, que se llama marcelolongobardi.com y lo único que hace es subir sus editoriales de Radio Mitre y alguna que otra noticia. Con suerte le darán trabajo o dos o tres pasantes que seguramente estarán precarizados, y que con eso se le da cierta visibilidad a esa página web. Así como eso tenés a Majul, Feinmann, Novaresio. Si vos te pones a rascar un poquito, entre las principales figuras de los medios de comunicación hegemónicos, te das cuenta de que hay de todo. Había una pauta del Senado de la Nación cuando Gabriela Michetti era el presidente del senado, que vos no tenés ni idea de cómo se justificaba ni cómo se sostenía.
Carlos Abrevaya
Hay una herencia, pero no pesada, sino muy linda, que cada vez que recuerdo públicamente la figura de mi viejo siempre del otro lado me devuelven infinidad de comentarios de afecto, de cariño, de admiración. Ya pasaron 26 años desde que mi viejo falleció y me sorprende cuánta gente todavía lo recuerda, cuánta gente tiene anécdotas con él.
A mí me pone muy contento, me hace muy feliz saber eso. Al mismo tiempo me da un sabor medio agridulce o amargo si querés, porque se me hace un poco más pesada la ausencia. ¿Cómo decir? ¡Era tan capo! ¡Tanta gente lo quería! ¡La puta! ¿Por qué no está acá hoy? ¿Por qué se fue tan pronto? Tenía apenas 45 años.
Lo que me pasa cuando veo parte de su trayectoria, cuando veo algún capítulo de la Noticia Rebelde, cuando leo algo que haya escrito, me parece que hay un montón de reflexiones que tienen una vigencia enorme. Me parece muy llamativo, como que los problemas de la Argentina vienen desde hace muchos años repitiéndose, me llama la atención eso y coincido prácticamente con todo lo que dice incluso cuando uno hace una lectura injusta, tratando de ponerle parámetros de esta realidad a una realidad de hace veinte o treinta años. Por ejemplo el tema de los medios de comunicación, en el libro Medios Locos, él hace un gran llamado a la sociedad argentina a que asuma su responsabilidad en la lucha por medios de comunicación democráticos que estén cerca de los problemas de la gente.
https://youtu.be/-5PXOGUc67k