El caso saltó a la primera plana de los diarios en agosto de 2000, con motivo de la cobarde huida de Roma del por entonces mayor del ejército Jorge Antonio Olivera, abogado de los genocidas militares Carlos Guillermo Suárez Mason y Emilio Eduardo Massera. Francia había pedido su captura internacional por el secuestro y posterior desaparición, el 15 de octubre de 1976, de una chica franco-argentina.
¿Quién era ella?
Sus padres eran colonos franceses. Nacida el 28 de marzo de 1952 en Espartillar, Saavedra, provincia de Buenos Aires, pero luego radicada en Misiones, vivió su infancia en pleno monte misionero.
Marie-Anne Erize Tisseau (esos eran sus dos apellidos) era una joven hermosa, de ojos claros, fina, distinguida, que había sido modelo en una publicidad de cigarrillos de “Jockey Club” y tapa de las revistas “Gente” y “Siete Días”. Hacía pasarela para primeras marcas de ropa y conoció los boliches bailables más renombrados de aquellos fines de los ’60. Cualquier chica hueca hubiera sentido que tocaba el cielo con las manos con la mitad de esos logros temporales. Vistas las cosas de esta manera, ella tenía un porvenir asegurado, trabajo nunca faltaba y seguramente algún marido acaudalado aparecería.
En tanto se ocupaba de estos frívolos menesteres estudiaba periodismo en la Universidad de Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires. Ocasionalmente trabajaba de azafata en Austral Líneas Aéreas.
Pero en esta sensual niña, como en tantas otras de esa generación, algo en su mente hizo un “click” y comenzó a darse cuenta que “nadie puede realizarse en un país que no se realiza” (Perón dixit).
Su amiga Ana de Skalon recuerda: “A pocas cuadras de su casa, la villa del Bajo Belgrano se había extendido a lo largo de varias manzanas. Un paisaje humano que le recordaba a Misiones, la tierra donde sus padres franceses se habían afincado. Las voces paraguayas y provincianas no le eran ajenas. Rápidamente se sintió cómoda entre esos niños a quienes cuidaba como maestra jardinera. Se hizo amigos entre los habitantes de los ranchos y comenzó a preocuparse por ellos. Nacía la militante”.
Bella, distinguida, y militante peronista.
Además, era estudiante de Ciencias Antropológicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Marie-Anne dejó toda esa vida frívola atrás, para comenzar a militar en la Juventud Peronista (JP) y luego en Montoneros. Donde era conocida con el sobrenombre de “Lobita”.
Pese al golpe militar, siguió resistiendo la entrega descarada de nuestro país, y perseguida por su obra anterior en la organización política y social de la Zona 31 de la Villa de Retiro, se fue a vivir clandestinamente primero a Mendoza donde trabajó en una agencia de turismo y al caer ahí su pareja de vida y militancia, se pasa a la ciudad de San Juan.
Esa pareja, “El Flaco” Diego Rabanal, montonero, dibujante de historietas, fue blanqueado como preso y pudo salvarse del genocidio perpetrado en siete años de feroz dictadura. Habla sobre ella: “En las villas su trabajo era impresionante, se transformaba en una villera más y la gente la adoraba, ella tenía un cariño muy especial sobre todo con los chicos y su compromiso con la gente pobre era increíble”.
El 15 de octubre de 1976 es secuestrada en la vía pública en la intersección de las calles General Acha (S) y Abraham Tapia, ciudad de San Juan, donde estaba la bicicletería “Palacio” a la que ella había ido a dejar su rodado por una pinchadura. Tenía encima un documento trucho a nombre de Gloria Ruth Goldenberg que no le sirvió para la ocasión. Fue asesinada el 22-10-76.
Al momento de su desaparición con 24 años, trabajaba en los olivares como jornalera recolectando aceitunas y daba clases de francés y matemáticas en un barrio obrero.
Su amiga Margarita Camus, nieta del ex gobernador Eloy Próspero Camus, cuenta que el mayor Jorge Antonio Olivera y el coronel Eduardo Antonio Cardozo –por esa época jóvenes oficiales-, “se jactaban ante la tropa de haber violada a la francesa”, en el campo clandestino de detención y exterminio “La Marquesita”.
El caradura del ministro de Interior de la dictadura, el general Albano Eduardo Harguindeguy, ante un reclamo francés de fecha 5 de enero de 1979, le asegura al embajador galo en nuestro país que Marie-Anne murió en un enfrentamiento.
Dicen algunos compañeros de militancia, que Marie-Anne y Joan Manuel Serrat se conocieron y que el cantautor catalán se inspiró en ella para escribir “La Montonera”, luego banda sonora de la película “Cazadores de utopías” (año 1995). Dicho tema, con anterioridad, en 1978, el Consejo Superior del Movimiento Peronista Montonero, lo publicó un flexi-disco para su difusión clandestina en Argentina. En la cara A y en la voz del poeta guerrillero Juan Gelman, había un análisis de la coyuntura nacional en ese momento; al dorso “La Montonera” que, en alguna parte, hermosamente dice: “Con esas manos de quererte tanto / pintaba en las paredes ‘Luche y Vuelve’ / manchando de esperanzas y de cantos / las veredas de aquel 69”.
Según afirma Diego Manrique en una nota aparecida en el matutino español “El País”, titulada Serrat y su misteriosa Montonera, cuenta que “Hacia 1969, Marianne (el periodista lo escribe junto al nombre de ella) viajó a Europa. Aquí conoció a Serrat y (George) Moustaki; también tuvo una relación breve con (el guitarrista) Paco de Lucía. Demostró audacia: al encontrarse sin dinero, ejerció de contrabandista de arte, exportando varios cuadros valiosos”.
Folleto de la época.
Al respecto debe recordarse que Serrat estuvo de visita en Buenos Aires para brindar un recital en el estadio del Club Atlético Vélez Sársfield el 20 de junio de 1983 –aún con la dictadura militar en el gobierno y en franca retirada- que fue suspendido por un aguacero. En la ocasión el Peronismo Revolucionario repartió entre los espectadores frustrados por el temporal, un volante dándole la bienvenida al cantautor y en su reverso la letra de “La Montonera”.
Como bien dice el escritor, periodista y ex militante de la Unión de Estudiantes Secundarios (UES) y Juventud Peronista, Juan José “Pájaro” Salinas, con la derrota del proyecto peronista montonero de la compañera Erize, “Argentina perdió su soberanía a manos de quienes la confiscaron y la ofrecieron al mejor postor. Desapareció así aquella soberana alegría de vivir en un país donde todo parecía posible. Donde chicas como Marie-Anne podía ir a las villas miseria y sentirse ahí como pez en el agua y donde los villeros podían ir a la casa de ella. Una Argentina con un horizonte de integración social, trabajo y fraternidad”.
En el año 2012, Philippe Broussard –reportero del diario “Le Monde”- dio a conocer su libro “La desaparecida de San Juan” editado por Planeta.
Un recordatorio aparecido en el matutino porteño “Página 12” con fecha 16 de diciembre de 2017, la reivindica como parte del “Homenaje a militantes populares desaparecidos y asesinados en Zona ‘Eva Perón’-Villa 31 – Retiro” (donde también militó y conoció al padre Carlos Mugica) a realizarse el domingo 17 de diciembre en calles 4 y 5, Feria Barrio Güemes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Por su parte, el hijo de Leonardo Favio, Nico Favio, en su álbum musical “Vuelo Nocturno” (2018) es autor de la letra y la música del tema “Canción para Marianne Erize” con subtítulos en inglés y francés ya que subyace la idea de que llegue a cada rincón del mundo porque va “dedicado con todo cariño a los familiares y amigos de Marianne Erize y su memoria viva”.
Noticia de diciembre de 2023. Día 10. En la Escuela de Educación Superior N 9 'Rodolfo Walsh'- sita en Jachal 3680, pueblo de William Morris, partido de Hurlingham, provincia de Buenos Aires; los estudiantes del colegio presentaron una obra de teatro sobre la vida de Marie-Anne Erize que lleva por título: “Marie-Anne entre dos mundos”. El escenario fue el teatro “Brote” de la calle Gaboto N° 1136, Hurlingham, provincia de Buenos Aires.
El cobarde de Jorge Antonio Olivera por su parte siguió sumando oprobio y vergüenza en grado superlativo. Su padre fue el general Jorge Olivera Rovere también sentenciado a cadena perpetua por genocida ya que fue adjunto del general Guillermo Suárez Mason y subjefe del I Cuerpo de Ejército, en Palermo, donde funcionaron varias cárceles ilegales de durante la última dictadura.
Según puede leerse en internet, Olivera hijo “fue encontrado culpable de diversos crímenes contra la humanidad, mientras se desempeñaba al mando de diversos centros clandestinos de detención en el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional, en la provincia de San Juan y por ello, condenado a prisión perpetua y destituido”.
Marie Anne realizaba tareas sociales y políticas en los barrios populares.
Pero “se encontró prófugo de la Justicia argentina durante cuatro años, tras una fuga el 25 de julio de 2013, cuando era trasladado para una revisación médica en el Hospital Argerich, en la Ciudad de Buenos Aires, por una supuesta afección dermatológica y controles kinesiológicos y psicológicos. Olivera fue recapturado el 30 de enero de 2017, mientras se encontraba escondido en el baúl de un auto en la casa de su familia en San Isidro”. Cabe acotar que su esposa, Marta Ravasi, trabajaba –casualmente- en dicho nosocomio del cual se había fugado.
El esperpento de “Isidoro Cañones” Olivera volvió a la primera plana de los periódicos, en “Página 12”, el 8 de febrero de este año. “Con Palito Ortega como principal atracción, Olivera celebró sus 50 años de casado en un multitudinario festejo en su casa de Vicente López, donde cumple detención domiciliaria”.
Paradójicamente, “a Olivera se lo escuchó poco esa noche. No habló demasiado, pero, tal como dan cuenta los videos que circularon, estuvo exultante durante el show de Palito en el que no faltaron ni clásicos (como ‘La felicidad’, ‘Corazón contento’, ‘Viva la vida’) ni pausas para la reflexión sobre el amor a través de los años. El represor, recordado como uno de los que jugaba al truco para decidir turnos de violación de la modelo franco-argentina desaparecida Marie Anne Erize, no es verborrágico. Por algo se ganó el apodo de ‘El Carnicero de San Juan’: sin mediar palabras tenía la afición de cortar y poner ‘carne a la parrilla’, es decir, personas sobre las mesas de tortura en los centros clandestinos de detención”.