El otro Frondizi

• Por Matías Escot
•   4 de Octubre de 2024

El Fusilado

Cae la tarde de viernes en el oeste del conurbano bonaerense y Ricardo, como lo hace todos los días, pisa la estación de Morón. Es militante de la JUP (Juventud Trabajadora Peronista), y como siempre comprará el diario: uno de los títulos lo conmociona y espera llegar lo más pronto posible a la casa de la calle Cangallo- ex Perón-, aunque ya será tarde. Allí lo esperan su otro hermano, su sobrino y su padre, pero la noticia que su hermano había sido secuestrado, los mudó al Destacamento Güemes de Ezeiza. Cuando en la morgue corran la sábana, el cadáver resultará impactante: ese hombre había sido acribillado. Su cuerpo, encontrado en un descampado de Ezeiza, tenía alrededor de 50 balazos. Es 1974, y ya comenzó la primavera, aunque lo que viene en el país es una larga noche de dictadura, muerte y desapariciones que durará más de lo previsto.

Este artículo arroja la primera pregunta, ¿quién era ese hombre que fue arrastrado secuestrado por un grupo de tareas y subido a un Falcon verde, para terminar en una morgue en Ezeiza?

Sus inicios, sus estudios

Julio, o Giulio Frondizi, de descendencia italiana, se casa con Isabel Ercoli, y tiene una familia archinumerosa: 14 hijos, divididos equitativamente; siete varones y siete mujeres. Viven en Buenos Aires, pero por trabajo migran a Paso de los Libres, Corrientes. Allí se consolidan como una familia de buena posición económica, y sus últimos tres hijos serán protagonistas de la vida política y cultural argentina.

En 1907, nace Silvio, un año después Arturo, y en el año del primer centenario de la Patria, Argentino Risieri. El primero será un intelectual, el segundo Presidente de la Nación, y el tercero, filósofo, antropólogo y rector de la Universidad de Buenos Aires.

Comenzada la década del 20, la familia Frondizi vive en Concepción del Uruguay, pero en 1923 Julio retorna a Buenos Aires y se instala en un caserón de Villa Devoto. Sus hijos se crían en un ambiente muy cultural, bajo la influencia de un padre muy lector, y unas sobremesas donde se discute de política. Silvio estudiará en el Colegio Nacional Mariano Moreno. Antes lo había hecho en Concepción del Uruguay, en la escuela fundada por Justo José de Urquiza, pero en el Moreno culminará su bachillerato. Luego continuará su formación académica en la Universidad de Buenos Aires, a través de la carrera de Derecho, y será profesor de Historia. Iniciada la década de 1930, ejercerá la docencia en la Universidad de Tucumán, y en las aulas comenzará a ser referencia por lo rico de sus clases, sus conceptos y por, sobre todo, dedicación.

La década del 40´sera decisiva: llegado el golpe del 4 de junio de 1943, Tucumán se torna espesa para Silvio. Nuestro protagonista renuncia y vuelve a Buenos Aires para impartir clases en el Colegio de Ciencias Jurídicas, luego por una enfermedad pulmonar su médico le recomendará hacer viajes a la provincia Córdoba. En uno de estos viajes, a Unquillo, conocerá a su mujer, y tendrá dos hijos, Isabel Silvia y Julio Horacio.

Militancia y aporte intelectual

“El profesor Frondizi” es un hombre de izquierda y en su juventud se afilia a la Federación Juvenil Comunista; además será un intelectual que reflexiona sobre nuevos caminos y posicionamientos de la izquierda. Especializado en la historia intelectual del socialismo y el marxismo criollo, Horacio Tarcus marca dos cuestiones interesantes: Silvio Frondizi será el fundador de la Nueva Izquierda Argentina, con una línea de pensamiento fuera de los esquemas de la izquierda tradicional, o sea el troskismo, comunismo y socialismo argentino. Allí se va a postular la idea de un militante integral, opuesta a la división del trabajo de la izquierda nativa, entre los que pensaban y los que ganaban la calle. Aparte, será un adelantado ya que a principios de los 50 estará pensando y divulgando sus ideas acerca de la crisis del Estado-Nación, la erosión de los mismos y cómo actuar frente a un capitalismo global. Por supuesto que fue una tesis archiresistida para las izquierdas tradicionales.

Silvio, hermano de Arturo y y referente de la izquierda nacional.

Frondizi formará el grupo intelectual y político Praxis, y de allí surgirá otra idea inorgánica: la necesidad de generar nuevos movimientos sociales, ruta alternativa de la militancia y los partidos tradicionales ya que eso conduciría a la formación de nuevas bases políticas. A principio de los años 60, apuesta a los movimientos vecinales, las mujeres, los trabajadores por fuera de las estructuras existentes.

¿En qué categoría ingresa Silvio Frondizi como pensador? Según Tarcus, pero también Carlos Altamirano, es un intelectual marxista y heterodoxo, y desde ahí creará el Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR), como nuevo instrumento político.

Entre su hermano Arturo, y la Revolución Cubana

El descenso de la Sierra Maestra de Fidel, Camilo, Ernesto, y el apoyo popular el pueblo cubano, marcarán el triunfo de la Revolución en enero de 1959, luego de vencer al ejército regular del dictador Fulgencio Batista.

Frondizi quedará atravesado por aquella revolución, viajará a Cuba, y su reunión con Ernesto Guevara Lynch generará otro giro de magnitud en este intelectual que se movía por fuera de los encasillamientos. El MIR pasará a llamarse MIRP (la “P” será Popular), y la necesidad de incorporar a las masas en la lucha revolucionaria. También observa la urgencia de construir una internacional de partidos revolucionarios por fuera de la estructura del PC argentino. La experiencia del MIR se replicará en Chile (el partido de izquierda que apoya inicialmente a Salvador Allende), y también en México y Perú.

Por otra parte, el hermano de Silvio, Arturo, en 1958 será Presidente de la Nación, y Silvio sólo llamaría a votar en blanco, disgustado por el acuerdo de su hermano con Perón (Perón llamaba a votar por Frondizi, y este levantaba la proscripción para contra el peronismo para participar de las elecciones. Ley 4161 de proscripción del peronismo, arquitectura legal de la fusiladora).

El desencuentro entre hermanos se sostendrá cuando Arturo lance el Plan Conintes (Plan de Conmoción Interior), un visto bueno para que las Fuerzas Armadas pudieran reprimir a grupos políticos y organizaciones, y en esa suerte además caen los militantes del MIR.

Demás está decir que Silvio fue crítico del gobierno de su propio hermano.

De profesor a senador y el Hombre Nuevo

El 11 de marzo de 1973, Silvio fue elegido como senador por el Frente de Izquierda Popular (FIP), un partido que dirigía Jorge Abelardo Ramos, y que tenía entre sus filas a la mujer de John William Cooke, Alicia Eguren. En su rol de abogado comienza a representar a los presos políticos, y también es parte del Frente Antiimperialista por el Socialismo (FAS) que tenía vínculos estrechos con el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT). En 1974 - etapa de triunfo y ascenso del peronismo de la vuelta de Juan Domingo Perón -, la represión se hace activa a partir de “El brujo” o “Lopecito”, López Rega y la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina). Frondizi denuncia la tortura y fusilamiento de militantes catamarqueños, por el accionar de Benjamín Menéndez y el jefe de policías Alberto Villar.

El 30 de agosto del 74, bajo el gobierno de María Estela de Perón, cae asesinado Rodolfo Ortega Peña, otro militante y abogado de la causa popular, que junto a Eduardo Luis Duhalde presentaban habeas corpus bregando por la integridad de presos políticos. El 10 de septiembre cae “El Cuqui”, el cordobés Alfredo Alberto Curuchet militante en su juventud de la Federación Universitaria de Córdoba (FUC), también abogado y defensor de trabajadores, sindicalistas que caían tras las rejas.

Las balas picaban muy cerca.

El pasado viernes 27 de septiembre se cumplieron 50 años del día que este intelectual de la izquierda fuera secuestrado y masacrado, en el operativo dirigido por el anticomunista y alto funcionario de la Policía Federal Argentina, Luis Margaride, y bajo la tutela de José López Rega, aunque el operativo en territorio lo realizó el subcomisario Juan Ramón Morales. Su cuerpo recuperado por la familia fue velado en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), y hubo una brutal represión en el cortejo fúnebre cuando la Policía Federal robó el cajón, y sus restos estuvieron secuestrados unos días, hasta que fueron recuperados y enterrados en el Cementerio de la Chacarita.

Baldoza y homenaje para el militante asesinado por la Triple A.

A 50 años: Preguntas a la izquierda

La derecha asesina sin piedad, con balas, o tal vez como escribió Rodolfo Walsh en su Carta Abierta a la junta Militar, con planes económicos del Fondo Monetario Internacional (FMI), que condenan a millones a la pobreza. Pensando en Silvio Frondizi y su apuesta a una Nueva Izquierda, a nuevas ideas de la Izquierda de aquel entonces, ¿será un saldo pendiente de estos tiempos, una nueva izquierda en la Argentina? ¿Hay ideas superadoras del estado actual de cosas, o frases de clichés, o en casete, como si la realidad fuera la de la década de 1970? ¿Cómo hablar de clase trabajadora, cuando el mundo del trabajo del siglo XXI, ya no pasa por el empleado “de cuello gris” como solía mencionar la sociología a los obreros? Con un capitalismo trasnacionalizado, ¿las luchas es fragmentan? Es decir,  ¿el parate de la Ford en Córdoba, no tiene correlato en otra sucursal en cualquier provincia argentina u otro lugar del mundo?

Mientras la derecha ganó terreno en el mundo a través de la incorreción política y la rebeldía (puede revisarse el texto ¿La Rebeldía se volvió de Derecha?, de Pablo Stefanoni), es imprescindible dejar los casetes, y generar nuevos esquemas, ideas y propuestas. Es por ellos que, en el aniversario del asesinato de Silvio Frondizi, reflexionamos sobre su trayectoria intelectual, para pensar el presente atravesado por una nueva derecha, aunque con muchas raíces en el pasado. En estos tiempos continúa sobrevolando el fantasma, como le decían, de “el profesor Frondizi”.