“Mi gestión es de puertas abiertas, la gente viene a verme, me escribe al WhatsApp”
22 de Octubre de 2021
Por Leticia Martin
Salgo del hormiguero porteño una mañana primaveral y atravieso la Ciudad de Buenos Aires por la Autopista 25 de Mayo, tomando el Acceso Oeste y su empalme con la Ruta 7, para llegar en una hora y un poquito a San Andrés de Giles. Son solo 103 kilómetros, pero la gama de colores de su vegetación, salpicada cada tanto por enormes silos, me hacen sentir mucho más lejos.
Voy en busca de Carlos Puglelli, intendente de esa localidad desde 2015, reelecto con el 63,59% de los votos en 2019, y actual candidato a diputado provincial para las elecciones de medio término de 2021. No fue tan difícil como había imaginado. Pese a que está en campaña, se tomó varios minutos para conversar sobre su gobierno en pandemia, los desafíos de esta etapa final de la vacunación preventiva y sus desafíos a futuro.
¿Cómo te enteraste que estábamos en pandemia y cómo fue gobernar en esa situación?
Todavía no se conocía bien la enfermedad y si bien ya estábamos preparándonos, comprando insumos, barbijos, etc., cerca del 20 de marzo tuvimos en nuestra localidad a la primera mujer contagiada, la cuarta fallecida de la PBA, bah, del país. Venía de un crucero de España. En ese momento no había transmisión comunitaria. Fue todo un aprendizaje. Mi principal preocupación era el abastecimiento de comida. Me imaginaba todo cerrado y lo difícil que iba a ser eso. Pasamos de dar de comer a unas 500 familias una vez al mes; a tener 2000 familias por semana. Sin embargo tuvimos un fuerte apoyo del gobierno nacional y provincial. También mucha colaboración de los vecinos. La solidaridad nunca faltó, hubo voluntarios que se acercaron, empresarios, productores que aportaron algunos recursos. Antes de que el Estado nacional centralizara la compra de insumos para la pandemia, estuvimos a punto de adquirir un respirador. Así que, tras esa noticia y la de que nos mandarían camas, pudimos comprar otra serie de elementos.
¿Cómo es tu relación con el gobernador Axel Kicillof?
La verdad es que es una persona muy cercana, muy accesible. Tanto él como todos sus funcionarios estuvieron cerca nuestro todo este tiempo. Eso nos hizo sentir muy acompañados. Fue importante en el momento de mayor incertidumbre, cuando había que decirle a la sociedad que se cuidara… Hubo un gran convencimiento de todos en colaborar.
¿Cuál fue el sector social más afectado por la pandemia?
Los jóvenes son los que peor la pasaron. Los que tenían que cursar su último año, hacer su viaje de egresados, los que iniciaban una etapa escolar. Pensamos mucho en ellos. Recién hace 15 días que los jóvenes pudieron volver a los boliches. También hay que decir que ellos fueron muy activos durante la pandemia. Colaboraron con los vecinos en el peor momento de las restricciones, intentando que a nadie le falte un plato de comida, que era la gran preocupación.
¿Hoy cómo está el humor social?
Hoy es muy distinto el panorama, la normalidad es casi plena, la gente ve que hace muchos días que no hay casos nuevos ni pacientes internados y eso alienta. A la fecha tenemos solo dos casos aislados de hace casi diez días, gente que recibió visitas de afuera pero que rápidamente fue identificada y ahora está aislada.
¿Y la situación sanitaria?
La verdad que venimos muy bien. Desde hace varios meses que los mayores de 18 años tienen la posibilidad de vacunarse libremente; ahora se están vacunando los chicos entre 3 y 11 años. Antes se inició la vacunación de los chicos entre 12 y 17, que también fue muy bien. La mayoría de las personas acude a vacunarse sin problemas; así que tenemos, aproximadamente, unos 19.000 habitantes con al menos una dosis, que sería un 80% de la población vacunada, además de presencialidad plena en las escuelas, con los cuidados obvios de dimensiones y aforos; y prácticamente todas las actividades casi al 100%. La pandemia es algo que finalmente va a pasar.
¿Qué hecho o circunstancia despertó tu vocación política?
En mi casa, de raíces peronistas, siempre se habló mucho de política. Mi papá, mis tíos. Recuerdo la primera vez que entré a una unidad básica siendo muy chico, por ejemplo. Cosas que me hicieron sentir cierto gusto por la política. Después, el tiempo fue haciendo que tomara otras responsabilidades. Estudié en la Universidad Nacional de Luján, me recibí de contador y de licenciado en Administración y cuando estaba por terminar mis estudios, se empezó a formar acá en Giles un grupo de juventudes en torno a la figura de Luis Ghione, el intendente que me precedió, y con quien inicié mi militancia de una forma más concreta.
Si tuvieras que presentarte ante alguien que no te conoce de la política, ¿qué le contás?
Nací acá, en la ciudad cabecera del distrito, y viví toda mi vida en Giles. Hice la escuela primaria en el colegio de hermanas, la secundaria en el Colegio Nacional, y la Universidad en Luján, donde viajaba cada día en colectivo ida y vuelta. Ya recibido, comencé a ejercer como administrativo en La Serenísima, donde estuve unos tres años. En 2003, Luis Ghione me convoca para ejercer como contador en la Municipalidad, en este mismo edificio, y esa fue una experiencia muy intensa de trabajo técnico, pero también con mirada política; veía cómo cada papel, o cada número en una columna de Excel, se iba transformando en soluciones concretas para la gente. Pensá que mi formación académica está en un 98% enfocada a la administración de lo privado, uno se prepara para eso. Pero la oportunidad que me dio Ghione de conocer la gestión pública fue algo revelador para mí, fue darme cuenta de que esto era lo que me gustaba.
¿Tu carrera política incluye un mandato como concejal, ¿no?
Sí. Pero ejercí por poco tiempo. Tomaba licencia y volvía al ejecutivo para trabajar con Luis Ghione. En el 2013 él tiene un problema de salud y como yo era el primer concejal, lo reemplacé por dos años, es decir que le completé el mandato hasta 2015.
Y después de eso vino tu candidatura a intendente.
Claro, sí. En 2015 me presenté en la lista del Frente Renovador y gané con un 54%. Ya en 2019 me presenté por el Frente de Todos y saqué el 64% de los votos. De alguna manera el voto confirmó mi forma de gestionar.
¿Qué alimenta tu fe en la política, o te da fuerzas para continuar cuando la coyuntura se pone áspera?
Las obras. Ver que algo se termina, que antes era una licitación, un papel, algo que estabas ideando y que, de pronto, se concreta, que le va a cambiar la vida a alguien. Cuando termina una obra, se termina un proceso complejo: conseguir recursos, preparar proyectos, licitar, articular con la Nación y con la Provincia. De esas gestiones se hace un arte.
Al norte de la provincia de Buenos Aires 103 kilómetros de CABA. | Foto: Leticia Martín.
¿Y el tren? ¿Es cierto que la línea Mitre está llegando a San Andrés de Giles?
Sí, ese es un lindo proyecto. Impensado, la verdad. Porque también ahí hay que destacar el trabajo que viene haciendo el Ministerio de Transporte de la Nación, con Alexis Guerrera, que es de General Pintos; también Martín Marinucci, de Trenes Argentinos. Esa gestión está llevando el tren a lugares en los que hace más de treinta años no llegaba. Por ejemplo en el caso de Solís, que es una localidad de nuestro partido, ya se está trabajando sobre las vías y la obra está en marcha. De verdad que se avanzó muy rápidamente.
¿Y hay fechas de finalización de obra?
Ahora están trabajando entre Solis y San Antonio de Areco, que es la primera etapa de este recorrido. Entendemos que cerca de fin de año ya vamos a tener el tren aquí. También me tocó estar en Lima hace unos días, que es una localidad de Zárate en la que hace más de treinta años que el tren no pasa. Ese sueño que parecía tan lejano empieza a verse más cerca. También estamos trabajando en la posibilidad de traer el tren a otra localidad nuestra muy turística que es Azcuénaga. Sería un ramal que uniría Luján con Vagués, en San Antonio de Areco.
Pueblo de veinte mil habitantes, se conocen todos, incluido el intendente. | Foto: Leticia Martín.
¿Cuál es tu mecanismo de escucha de las demandas de la población?
Esta es una comunidad chica, así que nos conocemos casi todos. Y mi gestión es de puertas abiertas, por lo que la gente viene a verme, me escribe al Whatsapp, que lo tiene todo el mundo. También me gusta acercarme a los barrios, a las distintas instituciones. Ahora estamos recuperando un montón de formas de acercamiento que la pandemia nos había restringido.
Leí por ahí que todos saben dónde vivís y te tocan el timbre de tu casa.
Sí, sí, muchísimo. Es difícil no enterarse de algo que pasa acá. Y si no te enterás antes, van y te tocan el timbre. Acá atendés todos los días.
Ahora que estamos saliendo de la pandemia, ¿se abre como posibilidad que la gente se venga a vivir a estas zonas rurales?
Concretamente en la pandemia ya tuvimos gente que venía porque trabajaba en modalidad home office. Sobre todo en el verano, recibimos una afluencia de turistas muy grande provenientes de Capital y Gran Buenos Aires. Las familias vienen a alquilar quintas, casas de fin de semana, tanto que no había casi disponibilidad. Se agotó todo. Ahora notamos que está creciendo mucho el turismo rural de fines de semana. Estamos cerca, tenemos autovía por la ruta 7, por la ruta 8, o sea que eso hace que estemos accesibles de forma rápida y segura. Además tenemos una serie de pueblitos muy pintorescos, una oferta gastronómica muy amplia, y la gente busca eso.
¿Cómo queda la intendencia de San Andrés de Giles ahora que —concluidas las PASO— sabemos que muy probablemente seas diputado?
Acá asumirá como intendente en mi lugar el primer candidato a concejal Miguel Gesualdi, que hoy es mi secretario de Gobierno. En lo que a mí respecta, voy a viajar a La Plata, que es cerca, a unos 160 km, para quedarme viviendo acá en Giles y seguir colaborando en todas la cuestiones que necesite la provincia y también las de mi sección. Quiero ser una especie de embajador de mi ciudad, poder acercar aquellas demandas que todavía nos faltan, en las que ya venimos trabajando; porque esta es mi ciudad, la ciudad que quiero y a la que le dediqué un montón de tiempo.
¿Cómo pensás la oferta cultural en San Andrés de Giles?
Nosotros articulamos mucho con las distintas instituciones: los clubes, las escuelas municipales, las escuelas de danza, de música, la orquesta infanto juvenil. Eso está en distintas partes de nuestras localidades y tratamos de brindarles los elementos o espacios que necesitan. También durante la pandemia trasladamos algunos espectáculos municipales a los locales gastronómicos, que son parte de la industria cultural, y que estaban restringidos por el aforo. De este modo les dimos un impulso. Además este año le incorporamos sonido propio a nuestra sala teatral, que es un edificio muy antiguo en manos de la Sociedad Española y que desde los años 90 se viene alquilando. Todo el dinero que la Secretaría de Cultura no pudo ejecutar en actividades por la pandemia lo aprovechamos para poner en valor ese espacio. Estamos trabajando mucho en diversos aspectos de la cultura para la reactivación.
¿Cómo te gustaría cerrar la entrevista?
Creo que a nivel nacional, provincial y municipal teníamos una serie de enormes desafíos cuando asumimos la gestión en 2019, pero la pandemia nos hizo poner en pausa toda esa agenda. Sin embargo ya hay indicadores económicos que muestran que está empezando a reactivarse la economía y la producción, algo que es lento porque no se traduce tan rápidamente en el bolsillo de la gente porque eso no es inmediato, pero que finalmente va a suceder. El año que viene va a ser distinto, cuando empiece a sentirse ese crecimiento y la reactivación en el día a día, todo va a mejorar.
San Andrés de Giles es uno de los destinos del turismo gastronómico de fin de semana. | Foto: Leticia Martín
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