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De las burbujas al almicidio
18 de Febrero de 2025
Por Claudio Colombatti (psicoanalista)
El presidente Shreber fue el caso seleccionado por Sigmund Freud para explicar las psicosis, o lo que podemos llamar “los fenómenos de la alienación”.
Shreber había asumido como el presidente del Tribunal de Viena, y a partir de ahí desencadenó un cuadro psicótico. Entonces fue tratado por un médico que hizo lo que hacen hoy en día los tratamientos principalmente de psiquiatría: medicarlo e internarlo. Por esto Shreber llamó a su médico almicida, asesino de almas.
En otro texto que recomiendo, Freud nos dice que el psicoanálisis es un tratamiento para el espíritu. Explica, al comienzo del texto, que psique es una palabra griega que significa alma (psicoterapia: tratamiento por el espíritu).
Los fenómenos del espíritu fue la materia fundamental a la que se dedicó el filósofo alemán Georg Wilhelm Friedrich Hegel. En su obra, “Fenomenología del espíritu”, explica la subjetividad, la relación entre sujeto y objeto. Allí dice que no se puede hablar de objetos sin tener en cuenta la subjetividad (el espíritu). Él, Hegel, lo relaciona con la cultura y los discursos de una época. Estos son el material con que cuenta un sujeto para poder pensar. Acá entra la escuela, los relatos que nos cuentan, la formación, etc.
Irse al pasto mal
Cristina Fernández de Kirchner calificó de esta manera, irse al pasto mal, lo que le pasó al presidente Milei. Es un despiste del que no se sale sin consecuencias.
Resulta que el presidente Milei alentó la inversión a una criptomoneda que en poco tiempo se sobrevaloró, para terminar en valor cero. Los incautos que siguieron los consejos del presidente entraron en una lista de damnificados. Algunos, invirtieron gran parte de sus ahorros y perdieron sumas considerables. Se seguían los consejos nada más ni nada menos que de un presidente.
Centrémonos y mantengamos este detalle: cómo se piensa.
El presidente, que según un político de raza, sería un buen candidato al premio nobel de economía, decía tener muchos conocimiento sobre las criptomonedas. Sin embargo, en un tropiezo que lo lleva más allá de la banquina, quedó en evidencia que esta expuesto, él, por lo menos a consejos, objetivos y estrategias que pueden causar daños épicos. Si maneja los ahorros de un país de esta forma, el esfuerzo de años se esfuma en segundos, como un truco del Gran Hudini.
Yo no dudo de la buena intención y la buena voluntad de nuestro presidente, bendecido por el tarot y las predicciones de la astrología Maya. Lo que si me parece es que en su afán desmedido, se acerca a precipicios que lo pueden devorar. Tengamos en cuenta que maneja un colectivo y en ese colectivo estamos todos los argentinos. O sea estamos transitando al borde de un abismo.
Es el mismo colectivo que sufre los experimentos más insólitos en la historia de la Argentina. Acá tendría que comenzar una enumeración que no terminaría en esta nota.
La burbuja
Las criptomonedas, desarrolladas a partir del bitcoin, son muy distintas al bitcoin. El bitcoin se encamina a ser reserva de valor de países, o sea se puede llegar a comportar como el oro, y desplazar al dólar.
Max Keiser, experto en bitcoin, tuvo durante años el programa “Keiser report” que se trasmitía por Rusia TV, hasta la guerra con Ucrania, en febrero de 2022. Este hombre le recomendó a Milei que estudie a fondo todo lo que es bitcoin y criptomonedas porque podía terminar evaluando mal y caer en estafas. Este experto en bitcoin, que paso a ser asesor económico en el gobierno de El Salvador, califica a la mayoría de las criptomonedas, sobre todo las memes, como estafas. Es decir burbujas que se inflan y se rompen. Algunas han terminado en quiebra como la empresa Terra que tiene la criptomoneda “Luna”.
Hoy en día entran al mercado miles de criptomonedas por semana. Entonces el mercado del bitcoin esta totalmente enrarecido. Sobre todo cuando una criptomoneda en vez de estar sustentada con proyectos de inteligencia artificial, o de formas de transferencia en dinero digital, etc. Las memecoin son como figuritas que empiezan a cotizar, y pueden llegar a valores altísimos, para terminar en nada.
En esto, una memecoin, una figurita que empieza a cotizar, y que no tiene ningún respaldo, en esto nos metió nuestro presidente. Vuelvo a decir que no dudo de sus buenas intenciones, de nuestro presidente, pero como le recomendó Max Keiser, hay que estar preparado para algunas cosas, sobre todo cuando se manejan vehículos en los que se traslada mucha gente. A veces todo esto me recuerda la película “Relatos Salvajes”, sobre todo la escena del avión.
Otras burbujas
Así como hay burbujas en la economía, como lo que sucedió en 2008, hoy hay muchas burbujas en las criptomonedas. Las memecoin son inversiones de altísimo riesgo. Cualquiera que esté en el tema de bitcoin o las criptomonedas, reconoce que las memecoin son las más volátiles, entonces podemos decir burbujas.
Siguiendo a Heguel, el objeto de nuestra atención nos habla del sujeto. Así hay quienes valoran el crecimiento espiritual, el crecimiento y la formación intelectual, también quienes se dedican a divisas: como decía Joan Manuel Serrat, “el avaro a sus divisas”.
Cuando era niño, era muy divertido los juegos de figuritas, inclusive había juegos para ganar premios, juntando figuritas. Cosa de niños. Hay una memecoin que se llama Pepe, y tiene el dibujo del sapo Pepe.
Los niños también necesitan vivir con cierta protección, aislados de temas muy importantes. Es como si estuviesen en una burbuja, necesaria para que no se les vuelva traumática la realidad. Entonces preventivamente, se los aleja de algunos temas, exclusivos para mayores.
De la misma manera se producen burbujas para no pensar, y alejarnos de algunos temas. Por ejemplo cuando hay medios de comunicación que no abordan ciertos temas, están direccionando la atención. O simplemente una maniobra de distracción. Las burbujas mediáticas llevan a cierto sector de a población a pensar y actuar en relación a la conveniencia de sectores de poder.
Otra burbuja que se va produciendo es la generada por las pantallas, en especial la de los celulares, que en algunos casos van succionando al sujeto.
Todas estas formas de burbujas, las mediáticas, las de las redes antisociales, llegan a alterar la forma de pensar la realidad, o sea que alteran el juicio y las decisiones.
La alienación como objetivo
Los medios de comunicación hegemónicos y masivos, como las redes sociales, van provocando un direccionamiento de la opinión pública. Nos van proponiendo qué pensar, y cómo pensarlo. Eligen dónde poner la atención y qué pasar por alto. A veces alejándonos de temas centrales y vitales. Aturden con la misma noticia, a veces falsa. Desvían la atención. Distraen, entretienen. Juegan con las emociones y provocan indignación. Cultivan la falta de análisis, y el analfabetismo político.
Recientemente se conoció la noticia que USAID, organización no gubernamental de Estados Unidos, que apoyaba el “periodismo independiente”, dejó de ser financiada por la administración gubernamental. Esta organización a su vez financiaba a más de 6.000 periodistas, más de 700 medios de comunicación y 279 ONG, de países de todo el mundo.
Este acto de pagar un sueldo a periodistas por parte de una organización no gubernamental de Estados Unidos es la forma de direccionar el pensamiento y el análisis de la población
Esta es la forma de trabajar sobre la subjetividad de la población. Colonizando subjetividades.
Para muestra doméstica alcanza un botón. Hace solo unas horas, el país entero fue testigo del escandaloso arreglo que protagonizaron el “periodista” Jonathan Viale, de la señal TN, y el mismísimo presidente Milei, al guionar en conjunto las preguntas del entrevistador.
Me pregunto si lo que pensaba Shreber hoy podría ser aplicable, cuando colonizan, interrumpen o obstaculizan la subjetividad y no te dejan pensar. Cuando alteran la subjetividad, ¿hasta qué punto no es un almicidio?
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