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“Esperamos que nuestra orquesta plante una nueva bandera en el mundo del tango”

La Empoderada Orquesta Atípica es una agrupación de tango transfeminista, organizada en una cooperativa, que ejecuta exclusivamente música de compositoras mujeres y disidencias, en un ambiente muy poco acostumbrado a estas transgresiones. A fines del 2022 recibieron un reconocimiento en la legislatura porteña y acaban de lanzar su primer disco. Kranear conversó con dos de sus integrantes: Pamela Victoriano y Andrea Soccorso.

Foto portada: Caro Pedace

La Empoderada Orquesta Atípica es una agrupación de tango transfeminista formada en 2018, a partir del interés de un colectivo de mujeres en impulsar un proyecto con perspectiva de género. Como parte de su identidad, la agrupación incorpora instrumentos no tradicionales para las orquestas típicas, y su principal interés radica en visibilizar la diversidad, resignificar los roles y erradicar la concepción de que el tango es una ‘cosa de hombres’, rompiendo así con la lógica histórica patriarcal. Celebrando la autogestión en el terreno musical, acaban de estrenar su ópera prima, titulada “Acá Estamos”. Con orgullo y emoción por el camino recorrido, Pamela Victoriano, su directora, y Andrea Soccorso, música integrante de la orquesta, dialogaron con Kranear, a días del lanzamiento del flamante álbum.

Pamela, ¿cómo y cuándo se formó la orquesta?

Pamela: La orquesta se forma en 2018 por medio de una auto convocatoria en Facebook, en un grupo que se llamó “Banco de Mujeres Músicas”. Hace cinco años, los grupos de Facebook existían con más proliferación y no había ninguno, hasta ese momento, que se llamará así. Una chica lo armó porque buscaba una baterista para su banda y entonces incorporó a sus amigas músicas, como si fuera un grupo de WhatsApp. Dos amigas sumaron a otras, y así sucesivamente, el grupo se fue agrandando cada vez más. En un momento, otra chica tiró la idea de hacer una orquesta de cuerdas solo de mujeres, para lo cual estaban buscando directora y yo me ofrecí en tal condición. De inmediato, llegaron alrededor de trescientos mensajes de personas que tenían ganas de formar parte de esa orquesta. Fue tanto el movimiento, y tantas las diversas inquietudes que nos compartieron las interesadas en sumarse, que la idea explotó. Fue un estallido tan grande e impensado. Así fue como me hice cargo de la organización, a la expectativa de ver si salía algo, porque era muy posible que quedara en la nada, como muchos de los proyectos de esa índole.

¿Y de allí en más cómo continuaste?

Pamela: Formé grupos de Whats App y allí me escribían y decían que instrumento querían tocar; así estuve aproximadamente dos semanas, sumando gente. Armamos cinco grupos en total: de música académica, de jazz, de folclore, de tango y de música celta. Cuando esos grupos estaban conformados, generamos reuniones presenciales para conocernos, en donde delimitamos lo que queríamos hacer, más allá de estar en una orquesta de mujeres. A lo cual, de forma colectiva, el grupo decidió ser una gran orquesta llena de instrumentos atípicos, que no son los comunes que vas a encontrar en una orquesta de tango, como por ejemplo, vientos.

¿Cómo fue reunir por primera vez a todos aquellos que buscaban integrarse? 

Pamela: Empezamos a trabajar con un grupo que no tenía arreglos ni ninguna partitura para tocar. Era muy ecléctico porque había gente de todas las edades, de todos los lugares y niveles. No se conocían entre sí. Así que, con muchísimo trabajo, cariño al proyecto y paciencia empezamos con esta orquesta atípica de tango, porque no tiene vientos ni guitarras ni varias cantantes como nosotras que tenemos cuatro, y en su primer momento eran doce. La idea era armar algo completamente diferente.

Andrea, ¿cómo llegaste a la orquesta?

Andrea: Yo estoy desde los inicios de La Empoderada. Me acuerdo que me enteré a través de un grupo de Facebook que se estaba haciendo una convocatoria para mujeres que querían tocar tango. En los primeros encuentros fuimos alrededor de ochenta personas, una demanda muy grande. No todas se fueron quedando; al principio, como miembros estables, comenzamos siendo treinta y cinco en la orquesta y ahora somos veintidós. Igualmente, lo lindo es que todavía quedamos muchas de las que estamos desde el comienzo del proyecto. Así que eso es súper lindo, como así también el ver gente que ingresó hace menos tiempo. Yo llegué a través de esa convocatoria, con ese sentimiento tan desde adentro y tan vivo: la necesidad de tocar tango. Me pasaba de por ahí no tener el espacio o no sentirme cómoda en determinados lugares o con determinados tangos con temáticas patriarcales. No me sentía representada por lo que nos estaba pasando en ese momento.

¿Y cómo se divide hoy la orquesta? 

Andrea: La orquesta se divide en distintas comisiones y dentro de cada una de ellas hay una coordinadora y co-equipas. Nuestro proyecto es una cooperativa autogestiva bajo un concepto de horizontalidad plena. Yo soy miembro de la comisión de Prensa y Difusión, y luego están las de Música, Transcripción de partes y grabaciones, Comunicación interna, Pre producción, Puesta en escena, Sonido, Delegadas del evento, Tesorería, Gestión de recursos y asuntos legales, Relaciones públicas y Giras. Es así como funciona esta maquinaria. Es un punto muy importante de nuestra identidad para hacer y ejercer toda la independencia posible y trabajar como nosotras queremos que sea.

¿Cuándo sintieron que el proyecto estaba creciendo y afianzándose?

Andrea: Primero empezamos a armar el proyecto y a buscar temas de compositoras, personas no binarias, compositoras trans también. A través de lo cual se fue formando todo esto que va a estar plasmado en el disco. Así que, en ese sentido, fue un proceso y un recorrido súper mágico, con un montón de cosas lindas vividas. Tocamos en lugares muy hermosos que estamos agradecidas de haber llegado y ahora somos afortunadas de ver el fruto de todo este trabajo. Un esfuerzo en todo sentido, desde lo económico al esfuerzo de ensayar, juntarnos, armar arreglos nuevos y encontrarle un sonido especial a la orquesta.

Pamela: Durante los primeros seis meses de la orquesta trabajamos con repertorio clásico y tradicional, para luego volcarnos a uno integrado solamente por mujeres y disidencias del tango actual. El proyecto duró mucho tiempo, porque en el medio apareció la pandemia, y en cuanto pudimos empezamos a grabar el disco, proceso que nos llevó en total un año.

¿Qué nos pueden comentar de “Acá Estamos”?

Pamela: Nuestro primer disco salió al mercado el pasado 16 de junio y se encuentra disponible en todas las plataformas. Es increíble, y no es porque sea nuestro, pero es la verdad. Es un material que se hizo con mucho tiempo de trabajo, nos llevó un año completo. Se hizo de una forma muy especial, ya que tuvo una planificación a nivel técnico superadora en cuanto al sonido, de lo que es un disco de una orquesta de tango en la actualidad. Traemos una forma técnica de mezclar, de grabar y de editar un disco totalmente nueva y disruptiva. Está plasmado allí un repertorio completamente diferente. También hay fusión dentro de lo que hicimos. Incorporamos una milonga que es una fusión con cumbia y estamos muy satisfechas con lo creado, porque es muy difícil intentarlo y que no quede como una superposición de estilos, sino que haya una mezcla, un maridaje, entre los dos. También tenemos un tema que es de un artista se llama Lichi, el único invitado a cantar en el disco, quien, además de ser músico y artista cantautor, es un reconocido YouTuber y es muy interesante lo que hace en sus redes. Hicimos un tema de él, que, por supuesto, no es un tango, ya que él compone canciones más rock, pop e indie. Entonces, tomamos un tema de su autoría y lo transformamos en un tango y también estamos muy contentas con lo que sucedió allí.

Pamela Victoriano

¿En dónde consideran que reside la importancia de este disco?

Andrea: Es un disco muy importante, primero, porque da a conocer el trabajo de artistas que estaban invisibilizadas en su estilo y manera de ver la vida. Eso también es el tango: una historia de la que nos toca cambiar un poco esa discursiva, incluyendo otras personas a su repertorio. Era lo queríamos, que haya ese punto de inflexión dentro del estilo y, obviamente, todo el trabajo que venimos haciendo en lo musical se va a ver reflejado y también consideramos que es importante que se difunda y se dé a conocer la mirada de las compositoras, que ahora nosotras interpretando y arreglando.

Pamela: El disco que tenemos es el primero de la historia en donde hay una orquesta formada por esta cantidad de gente. Es la primera vez que se arma una orquesta atípica que ejecuta, exclusivamente, música de compositoras mujeres y disidencias; lesbianas, personas trans y personas no binarias. Nuestro repertorio está íntimamente plasmado por un cancionero de compositores y compositoras que forma parte de las minorías. Y es poco posible que una orquesta típica toque algo así. Estamos muy lejos en el mundo del tango. Las orquestas, en su mayoría, solo tocan repertorio de hombres, y alguna vez quizás tocan algún tema de una mujer, pero es muy raro. Por lo general es un porcentaje muy alto, casi te diría completo, casi al ciento por ciento. Así que es en la primera vez que en un disco sucede esto, y también en una orquesta.

¿Cómo vivieron la presentación en vivo? 

Pamela: El 15 de junio, un día antes del estreno, hicimos un prelanzamiento para prensa, en “La Paz Arriba” (Callao 1082, primer piso, esquina Santa Fe, CABA), un lugar hermoso y súper citadino y característico del tango, ubicado en pleno microcentro. Es un lugar muy mágico, acorde a la celebración y allí estuvimos, junto a todas y todos nuestros invitados, tocando los temas del disco y algunos más que quedaron afuera. Queríamos festejar después de medianoche la inminente salida del material que tanto trabajo nos llevó y tan costoso fue, desde todo punto de vista.

Andrea Soccorso

¿Cuál es la principal conquista que ha logrado la orquesta y cuál es la próxima lucha?

Andrea: Es muchísimo trabajo hacer un disco, así que estamos muy ansiosas de que la orquesta siga tocando y mostrando composiciones nuevas, de mujeres, de lesbianas y de personas trans. Hay hoy en día un montón de material que habla acerca de ello y no se da a conocer.

Pamela: En este momento nosotras somos veintidós mujeres, pero nuestra orquesta, alrededor de su historia, albergó todo tipo de identidades y está abierta en esa línea. Así que estamos muy contentas, porque esperemos que plante una bandera nueva y, sobre todo, lo más importante, es que nos hace muy bien y es el motor que mueve el proyecto. El hecho de que nuestro público, y el público que vamos a buscar, no es un público tanguero, ni un público que suele escuchar tango, sino que es un público que, de repente, comenzó a escuchar La Empoderada porque sintió que algo de eso le pertenecía. Con algo de eso se empieza a identificar ese público; con las letras, con puntos de vistas diferentes, con otras temáticas y con otros tipos de temas que empezamos a hablar en el tango. Que tienen que ver con una representación diferente, que no existe en el tango de hoy en día en un formato de orquesta. Así que, el hecho de que un público pueda venir a ver una orquesta de tango y que lo que ve en el escenario le parezca familiar y escucha en las temáticas y las letras lo represente, es fundamental para nosotras. Que el público entienda de qué estamos hablando, me parece que ese es nuestro norte. Por eso, nuestro público no es un público que escuche habitualmente tango.

¿Cómo ven al público que escucha tango en nuestro país?

Pamela: El público que escucha tango, el público tanguero de Buenos Aires, una fábrica de tango y única en todo el mundo, es muy pequeño. Sabiendo que el tango es muy exitoso en todo el mundo, es llamativo que nuestro público del tango nuevo sea tan pequeño. Esa es otra de las luchas y militancias de la orquesta: poder ampliar ese público que escucha tango. Que sea un público más popular, que no sea un público elitista y que la música que le es ofrecida no sea solamente pensada para algunos pocos. Además de La Empoderada, hay muchos grupos que hacen tango nuevo y que son espectaculares. Nosotras somos fans de esos grupos, los vamos a ver siempre. Hay mucho respeto, mucha amistad y cariño en lo que es la familia tanguera.

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Andrea Soccorso es cellista y estudiante avanzada del Profesorado de Violoncello en el Conservatorio Julián Aguirre. Se ha formado en instrumental y teoría sobre tango en la Escuela Orlando Goñi, en distintos talleres y en clases particulares. Es integrante por varios años del cuarteto “La santa milonga”. Desde el año 2018 se desenvuelve como cellista de “La Empoderada”, orquesta atípica declarada recientemente de interés para la promoción y defensa de los derechos de las mujeres y diversidades en la Ciudad de Buenos Aires.

Pamela Victoriano es directora, violinista, arregladora y productora musical. Estudió Dirección de Orquesta entre los años 2005 y 2011. Desde el 2011 en adelante se formó en violín, tango y arreglos específicamente del género. Actualmente es la directora y arregladora de la Orquesta Municipal del partido de Malvinas Argentinas. También trabaja como directora de orquestas escuela en diferentes partes del conurbano bonaerense. Desde el año 2018 es la directora general y una de las arregladoras de “La Empoderada”, agrupación artística que se encuentra a punto de lanzar el primer disco de la historia en donde una orquesta de estas características genera un repertorio de tangos actuales compuestos mujeres, lesbianas, personas trans y no binarias.


author: Maximiliano Curcio

Maximiliano Curcio

Nació en la ciudad de La Plata, Argentina en 1983. Es escritor, docente y comunicador, egresado de la Escuela Superior de Cinematografía

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