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Entre la expansión creativa, la trinchera cultural y la necesidad de subsistencia

Media docena de escritores y talleristas reflexionan en esta nota sobre el presente de los talleres literarios como lugar de creatividad y búsqueda estética, pero también como espacios de contención y resistencia frente a un presente sombrío. ¿Cómo y cuánto interfiere el ruido de las redes sociales? ¿Los talleres están transitando un auge, un boom? Juan Pablo Cantini dialogó con Natalia Zito, Daniela Pasik, Esteban Godoy, Daniela Chueke, Silvina Gruppo y Loyds.

Desde hace algunos años, la idea de un auge de los talleres literarios circula con fuerza en redes sociales, ferias y en la proliferación de propuestas de todo tipo. Sin embargo, al consultar a distintos escritores y talleristas, surgieron miradas diversas: algunos relativizan la noción de boom, mientras que otros destacan su valor como espacios de creación, intercambio y resistencia cultural. También se menciona el rol que cumplen como salida laboral en un contexto de creciente precarización en el ámbito artístico. Además, se analizó el corazón de estas propuestas —nuevas o consolidadas— y el espíritu creativo que las sostiene en un escenario especialmente adverso.

La voz propia: entre el deseo creativo y el mandato para no quedarse afuera

Si nos desplazamos más allá de la cantidad de talleres que se ven en las redes sociales, podemos avanzar hacia los rasgos comunes que comparten muchas de las propuestas. Esto es, a qué apuntan y qué prometen estos espacios. La escritora y psicoanalista Natalia Zito dijo al respecto: “Prefiero dejar al periodismo la sanción de cuándo algo es o no un auge. Yo, que tengo el pensamiento tan atravesado por el psicoanálisis, no puedo dejar de ver las cosas de a una. Entonces, lo que sí puedo decir es que he visto múltiples ofertas de diversos talleres.” En ese conjunto de propuestas, Zito se detuvo especialmente en aquellas orientadas al desarrollo de una voz. “No sabría definir qué es la propia voz, porque yo, más bien, tengo muy claro que si hay algo que es impropio son las palabras. Escribimos con palabras siempre ajenas, siempre prestadas, a veces robadas, impuestas. Entonces, ¿cómo separar la voz de las palabras en la escritura? Ojalá que con ‘la voz’ se refieran al modo de encadenar una palabra tras otra, a esa sutileza en la que uno construye una sintaxis que ni siquiera sabría explicar.”

A su vez, Zito se refirió al rol que parecen jugar las redes sociales en esta búsqueda y promesa de la voz propia: “Intuyo que muchas veces se asocia ‘propia voz’ a ‘propia historia’, lo que alguien tiene para contar de sí mismo. Y eso quizá tenga que ver con esta época de redes sociales, que no paran de alimentar cierta exigencia en la que pareciera que todo el mundo tiene que pronunciarse, andar gritando quién es, lo que hace, porque, de lo contrario, corre peligro de desaparecer o quedarse afuera, quién sabe de qué”, reflexionó.

¿Un auge real o una salida de emergencia?

El aparente boom de los talleres literarios puede leerse, también, como una respuesta urgente ante la precarización de la vida cultural. En esta línea, Silvina Gruppo, escritora y docente universitaria, aportó una perspectiva que conecta la creciente oferta de propuestas con el contexto económico y político actual: “En una época en la que la cultura está tan menospreciada por los discursos y las políticas del gobierno, quienes nos dedicamos a la literatura necesitamos sumar ingresos extra.” Para Gruppo, esto influye directamente en la diversidad de propuestas: “Hay talleres de corte más teórico y también más lúdicos, se dan en bibliotecas, en bares, o por Zoom. Incluso hay talleres de lectura que se ofrecen junto a un plan gastronómico y llegué a ver propuestas interdisciplinarias con teatro o con tarot, por ejemplo.”

Gruppo también se refirió a su experiencia como docente: “La paradoja es la siguiente: los sueldos son miserables; a pesar de la escalada inflacionaria, el presupuesto que se maneja está atrasado desde 2023; de todos modos, las aulas están cada vez más llenas. Se va formando una comunidad sensible, inteligente y solidaria que se toma el arte en serio, en contra de la hostilidad y el silenciamiento al que nos quieren forzar.”

Además, Gruppo hizo hincapié en la necesidad que cubren estos espacios: “A quienes toman los talleres, los impulsa, supongo, la búsqueda de la voz propia y, también, el intento por darle valor a la vida, por obtener una riqueza cultural que nadie pueda arrebatar. Frente a la crisis, el odio, la violencia y el negacionismo, no puede ser que se pierda todo. Entonces surge la escritura como piedra en la que podemos hacer pie.”

Los talleres se brindan en facultades, centros culturales, librerías, unidades básicas o bibliotecas populares, como en este caso, sobre la calle García del Río, en Saavedra, CABA.

Mientras tanto, Esteban Godoy señaló: “Creo que desde hace varios años las propuestas se multiplican, tanto en cantidad como en formato o modalidad. Diez o quince años atrás, pocos escritores o escritoras lograban visibilidad, y eso sucedía principalmente porque tenían libros publicados, o aparecía alguna nota en un suplemento cultural. Con internet y las redes sociales, cualquier escritor, publicado o no, tiene a mano la posibilidad de mostrar su trabajo, sus propuestas, incluso de pagar publicidad para tener más llegada.”

El escritor y guionista Loyds también coincidió con el registro de un incremento en la oferta de talleres, pero al mismo tiempo cuestionó la idea de auge y puso en duda la calidad de muchas de las propuestas actuales: “Hoy, si levantamos una piedra, aparece un taller literario. Ahora bien, para mí un auge implica florecimiento, prosperidad, expansión. En ese sentido, entiendo que cantidad casi nunca es sinónimo de calidad. Incluso hay gente sin prácticamente antecedentes con la escritura que sale a dar su curso online de cuatro encuentros. Me encantaría pensar que puedan ser espacios de resistencia ante tanta desidia, ese romanticismo de seguir en el intento de escribir historias mientras allá afuera el mundo se cae a pedazos. Pero creo que es más bien la necesidad de parar la olla, de pagar las cuentas, de llegar a fin de mes.”

El espacio de los talleres literarios: comunidades de creación

Desde su mirada, la escritora, periodista y docente Daniela Chueke se refirió a la necesidad de estos espacios como escenarios de puesta en común e intercambio y se concentró en lo que sucede en ellos: “No sé si están en auge, pero los tenemos que poner de moda. Son espacios de intercambio donde uno puede crear junto con otros. Tal como señala Liliana Villanueva, nadie escribe solo, y es en los talleres donde uno encuentra a sus primeros lectores.

Entonces, en el taller no es que uno solamente se beneficia de lo que el docente o coordinador puede darle, sino que también se beneficia de la creación grupal, de la lectura de los demás, de las experiencias de los demás, del intercambio y de esa magia que se va formando en esa especie de cofradía formada por personas que comparten el amor por contar historias. Y, por supuesto, también por leer. Lectura y escritura están intrínsecamente ligadas.”

Por otro lado, Chueke se refirió a los talleres como una posibilidad de resistencia creativa frente al uso creciente de la inteligencia artificial como atajo ante cualquier necesidad creativa. Desde allí definió a los talleres literarios como “una especie de trinchera, el poder participar de un espacio de creación donde uno está entrenando el músculo de la imaginación, de la escritura, de la palabra, del descubrimiento, del goce, como dice Roland Barthes.”

Asimismo, para Godoy, la proliferación de talleres se relaciona con la búsqueda laboral, pero también con “el deseo genuino de transmitir lo que hacemos, compartir conocimientos, empujar nuevas voces y nuevos proyectos. Ante un contexto tan desmoralizador, la pulsión de ‘hacer’, de construir, se revela con más fuerza, y eso genera que nuevos escritores y escritoras busquen ayuda para sacar adelante sus textos”, sostuvo.

Taller de escritura de Silvina Gruppo en la UNA.

Por su parte, la escritora, periodista y docente Daniela Pasik se alejó de la idea del boom o auge y recordó los inicios de los talleres literarios en nuestro país: “La Argentina es uno de los países pioneros en tener espacios de talleres literarios, tal como los conocemos. Comienzan hacia finales de los años 60, principios de los 70. Los primeros en el país fueron el mítico Taller Mario Jorge De Lellis, que fue una continuidad del Taller Aníbal Ponce, y estaban relacionados con el Partido Comunista. De ahí salieron escritores/as como el Turco Asís, Marcelo Cohen, Irene Gruss o Jorge Aulicino, entre otros”, relató.

Un refugio más allá de los reduccionismos

Más allá de los matices y los diferentes puntos de vista que permiten abordar los talleres literarios, lo cierto es que estos continúan creciendo y mutando, adaptándose siempre a la cultura argentina. En este sentido, Pasik destacó que: “hay algo interesante en nuestra idiosincrasia nacional, donde lo cultural siempre se entrelaza con lo político y lo coyuntural. En tiempos buenos, florecen las opciones culturales, lo que es lo simple, lo bueno y lo esperable. Pero lo hermoso de nuestro país es que en tiempos de crisis, la respuesta es una mayor necesidad de cultura, o cultura como refugio.”

En este contexto, Zito resaltó el valor que representan estos talleres, al definirlos como: “un espacio regido por otro tiempo, como lo es la literatura, donde se puede escribir y leer en la complejidad, lejos del reduccionismo imperante, ese que obliga a estar visible, de un lado o del otro de lo que sea, ser obediente y moralmente comprometido. El taller, el que me interesa y trato de promover, está en las antípodas de todo eso. Eso es lo que busco en mis talleres, que cada uno encuentre el cauce de su propia escritura, y eso no ocurre si no se suspenden las exigencias y obediencias morales, sociales, familiares, entre otras.”

Así, entre la urgencia económica, la necesidad de espacios de encuentro con el otro y el deseo de expresión, los talleres literarios resisten y se reinventan. Tal vez no se trata de hablar de boom o auge, sino de pensar que la palabra, aún —o especialmente— en contextos oscuros y críticos como los que vivimos en la actualidad, sigue buscando su lugar.

Pasik dirige su taller literario, Las herramientas, hace doce años.

Trayectorias y propuestas de los talleristas entrevistados

Natalia Zito

Psicoanalista y escritora, licenciada en Psicología por la UBA. Es autora de varias obras destacadas, entre ellas: Vos (Emecé, 2023), Veintisiete noches (Galerna, 2021), Rara (Emecé, 2019), Traidores (Tilde, 2022) y Agua del mismo caño (Enero, 2014 y 2024), además de la obra teatral El momento desnudo (2019). Zito es columnista en Pasiones Argentinas y el diario Clarín, y ha publicado en medios internacionales como JotDown (España) y Firmament (EE. UU.).

En sus talleres, Zito propone una exploración profunda de temas literarios, eligiendo cada año un concepto central. En el presente ciclo, el tema es el silencio, abordado desde diversas perspectivas como la filosofía, la puntuación, la creación de silencios a través de las palabras y su presencia tanto en la poesía como en la prosa. Además, Zito organiza encuentros mensuales en los que los participantes se reúnen para compartir y discutir libros leídos, lo que fomenta una reflexión crítica sobre la literatura. Según la autora, entender qué hace a un libro valioso o no es esencial para quienes desean escribir. Los talleres están abiertos tanto de manera presencial como virtual para quienes deseen involucrarse en la lectura y escritura con un enfoque enriquecedor y reflexivo.

Cuenta de Instagram: @zito.natalia

Daniela Pasik

Escritora, periodista y docente, es autora del retrato biográfico de Irene Gruss El corazón del asunto (Gog y Magog, 2024), y escribe para, entre otros medios, LatFem, Revista Ñ y Clarín Cultura. Publicó los libros de investigación Porno Nuestro. Crónicas de sexo y cine (Marea Editorial, 2014) y Hacerse. Viaje de una mujer en busca de la cirugía perfecta (Grijalbo, 2010), la nouvelle Inicio (EDUVIM, 2011), la micronovela Historia de una chica que se enamoró de un pez (Editorial Funesiana, 2009) y el libro de poemas Alucinada (Modesto Rimba, 2017). Sus cuentos y poemas son parte de distintas antologías en la Argentina y, traducidos, en Israel. Es profesora en ETER en las carreras de Periodismo (Investigación Periodística) y Producción (Redacción).

Coordina el taller de narrativa Las herramientas desde 2013, en formatos presenciales y virtuales. Este taller se distingue por su espíritu de tertulia, donde se escribe y reflexiona sobre la literatura en sus diversas formas: narrativa, poesía, ensayo y dramaturgia. La propuesta se centra en ampliar la biblioteca personal de los participantes, leyendo textos de distintos géneros y épocas. Para Pasik, el taller es un espacio de encuentro creativo, sin distinción de nivel, donde todos los participantes pueden compartir y enriquecer sus experiencias literarias. Su enfoque fomenta la curiosidad, el sentido del humor y, por supuesto, las ganas de escribir.

Cuenta de Instagram: @unadanixa

Silvina Gruppo

Escritora y docente de la Licenciatura en Artes de la Escritura en la Universidad Nacional de las Artes. Sus novelas, Oeste (2019) y Cigüeñal (2022), fueron publicadas por la editorial Conejos.

De manera privada, ofrece clínicas de narrativa individuales, lo que significa que acompaña el desarrollo de proyectos de diferentes escritores. Su acompañamiento se caracteriza por una lectura atenta, devoluciones precisas y un seguimiento personalizado del proceso creativo. En la facultad, en cambio, los talleres que coordina son multitudinarios.

Cuenta de Instagram: @silvinagruppo

Loyds

Es escritor y guionista, conocido por su trabajo como curador de la Semana Negra de Buenos Aires. En 2014 publicó su primera novela, Merca, reeditada por el sello Emecé en 2021. Fue compilador, editor y coautor de la antología Cuentos cuervos (Planeta, 2014). Publicó también La mamá de Johnny (2021) y Pichón (2023), completando así la trilogía GCU (Gente como Uno) en la colección Emecé. Su narrativa ha sido traducida y publicada en varios países.

En sus talleres, Loyds se distingue por su enfoque pragmático y directo. Propone un espacio donde la crítica y el intercambio de ideas son esenciales para el desarrollo de la escritura. El enfoque de Loyds se centra en ayudar a los escritores a transmitir de manera fluida lo que quieren expresar, mantener una voz propia, respetar el pacto de la ficción y nunca perder el control del texto. Este enfoque ha dado excelentes resultados con sus grupos de escritores.

Cuenta de Instagram: @superloyds

Esteban Godoy

Es escritor y músico, con cuentos distinguidos en premios literarios como el Gran Premio Banco Provincia de Literatura 2023 y el Concurso Haroldo Conti 2023. Su cuento “Reunión” forma parte de la antología Bestiarios y Adioses (Ediciones Bonaerenses, 2023), y su cuento “Nieve”, de la antología Otros muchos sucesos (Ediciones Bonaerenses, 2024). Nadie a quien esperar (Factotum Ediciones) es su primera novela.

Su taller de narrativa se basa en la lectura en voz alta de textos escritos por los participantes, seguida de una ronda de crítica. No separa por niveles: cree que tanto escritores publicados como inéditos pueden enriquecerse mutuamente. El taller fomenta el intercambio y la mejora a través de la crítica constructiva, promoviendo un espacio de aprendizaje colectivo y de crecimiento literario.

Cuenta de Instagram: @_godoyes

Daniela Chueke

Es socióloga, escritora y periodista. Su ensayo El cuento del Gurú fue reconocido como el mejor del año y publicado por la revista ORSAI. Además, es columnista en La Nación y ha ganado premios por su labor periodística. Actualmente está terminando su primera novela, trabajando en clínica individual con Luis Mey.

En sus talleres, Chueke busca que los participantes desarrollen su deseo de escribir para ser leídos. Se enfoca en la práctica a través de ejercicios, lecturas y recomendaciones de libros, con un enfoque práctico y experto. Los encuentros, que se realizan dos sábados al mes en DAIN Usina Cultural, están destinados a personas que desean entrenar sus habilidades literarias con la guía de una escritora experimentada.

Para recibir información sobre su taller, escribir un correo a tallerasitelodigo@gmail.com

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Foto portada: taller de Natalia Zito.

author: Juan Pablo Cantini

Juan Pablo Cantini

Nació en 1976 en la Ciudad de Buenos Aires. Es licenciado en Ciencias de la Comunicación por la UBA, escritor, redactor y tallerista. Fue periodista gastronómico en medios especializados y publicó notas en Tiempo Argentino y Clarín. Su primera novela, Mordiendo en el vacío, fue editada por Notanpuan en 2022. Actualmente coordina talleres de lectura y escritura y trabaja en su segunda novela.

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